Estimados feligreses de Santiago:
¡Alabado sea Jesucristo nuestro Rey recién nacido!
Durante la temporada navideña, la Iglesia celebra a la Sagrada Familia, Jesús, María y José. Su amor, unidad y fidelidad forman un modelo para todos nosotros. Dios se hizo hombre en una familia pobre de clase trabajadora que exudaba una magnífica santidad. Jesucristo creció hasta la edad adulta sin dejar de ser divino. No podría haber elegido mejores ejemplos como padres que Nuestra Señora y San José.
Dios forma la familia alrededor del esposo y la esposa. Su amor debe estar lleno de la gracia de Dios. Después de casarse en el Sacramento del Santo Matrimonio en la Iglesia, los cónyuges deben estar abiertos a los hijos que Dios quiera enviarles. Cada niño es un regalo de Dios a sus padres. Edúquenlos en la Fe a través de su santo ejemplo. Prepárenlos para entrar al cielo de donde vinieron.
Hijos, amen a sus padres como los propios representantes de Dios. La autoridad de una madre o un padre es de Dios. Obedecen y respeten a sus padres como Dios manda. El Señor promete muchas bendiciones a aquellos que son buenos con sus padres.
Que esta fiesta llene sus corazones de afecto agradecido al Señor por el don de su familia. Con Jesús, María y José como nuestros modelos, podemos imitar su amorosa confianza en
El plan de Dios el Padre para nuestra salvación.
Que Dios los bendiga
P. Geary