Estimados feligreses de la Parroquia de Santiago Apóstol:
¡Alabado sea Jesucristo!
Esta Navidad será diferente a cualquier otra en nuestras vidas. La gente no está segura de sus planes, cuidando a sus seres queridos enfermos y sintiéndose ansiosa por la pandemia. Pero la Navidad seguirá llegando el 25 de diciembre. En todas maneras debemos celebrar el nacimiento del Señor que vino a salvarnos de nuestros pecados.
Hagan un lugar para Jesús en sus corazones. Si no pueden venir a Misa, recen el Rosario con la familia. Si no pueden venir a Misa, vean la Misa del Santo Padre desde el Vaticano en toda su belleza. Si no pueden venir a la Misa, lean el relato del nacimiento de Cristo del Evangelio antes de su comida. Nuestra fe debe crecer a pesar de (y debido a) la pandemia. Con el nacimiento de Jesús se inició nuestra salvación y así Dios entró en Su propia creación asumiendo nuestra naturaleza para elevarnos a la suya.
Jesús está entre nosotros en la Santísima Eucaristía. Vengan. Adorémoslo. Jesús vendrá de nuevo en gloria. Ven, Señor Jesús. Jesús ha nacido para nosotros. Vengan. Reconozcamos a Aquel que solo puede salvarnos.
Que Dios los bendiga
P. Geary